Capítulo 22

Habla sobre las diferentes posibilidades por las cuáles el anciano fue atropellado. El viejo no parece demasiado preocupado, sólo sonríe y se pasa la mano por el bigote. Un joven le indica a la policía la dirección del anciano. Oliviera discute con el joven y varias otras personas de cómo habían atropellado al hombre.
Oliveira continúa su recorrido y su monólogo. Reflexiona sobre las miserias del amor y la terrible paradoja que le plantea la otredad (la posibilidad de reconocer, respetar y convivir...), cuyo encuentro lo salvará de la terrible soledad.


Antonio Zorrilla

No hay comentarios:

Publicar un comentario